martes, 25 de febrero de 2014

Inicio de la Santa Cuaresma.

5 de marzo – Miércoles de Ceniza


1.    Carta Pastoral de nuestro Arzobispo
2.    Gesto Solidario Arquidiocesano
3.    Horarios en la Catedral de Buenos Aires

1.    Carta Pastoral del Sr. Arzobispo Card. Mario A. Poli

Cuaresma: enternecer el corazón

"Lo que cada uno sustrae a sus placeres,
lo dé a favor de los débiles y pobres"
S. León, sermón cuaresmal

Queridos hermanos:
En la liturgia del primer domingo de Cuaresma, como Iglesia suplicante pedimos al Dios de toda misericordia: "concédenos avanzar en la inteligencia del misterio de Cristo y vivirlo en plenitud"
La Cuaresma cristiana que iniciamos con la imposición de las cenizas nos introduce cada año más intensamente en la celebración del Misterio Pascual de Cristo, participación en su muerte, resurrección y ascensión. Así aspiramos a que la victoria de Cristo, nuestra Cabeza, se cumpla en todo su pueblo santo.
Hoy la Iglesia, prolonga y perfecciona esta Pascua de Cristo, el Señor de la historia, a lo largo del tiempo, pasando continuamente de la muerte del pecado a la vida nueva y gozosa de la gracia.
Si bien todo el Año Litúrgico es una llamada a asimilar el Misterio de Cristo, durante la Cuaresma y la Pascua lo experimentamos con mayor intensidad.
Bellamente, los cinco domingos en un "in crescendo" nos "inician" en ese Misterio y nos entrenan en el paso de la muerte a la vida. Paso  que expresa la liturgia cuaresmal con la palabra conversión: "cambio de mentalidad", “cambio de dirección". Que nuestra mentalidad tantas veces lejana al Evangelio, se convierta en mentalidad de Cristo. Que la vida cerrada a Dios y al prójimo  se abra con docilidad a la misericordia de Dios que vivifica y al amor concreto a los hermanos que transfigura la realidad.
Rasguen los corazones, no las vestiduras, conviértanse al Señor nos pide Dios por el profeta. Rasgar el corazón es declarar su vulnerabilidad aceptando la tentación y dejándonos embriagar por la visión esperanzada de la vida futura. Rasgar el corazón es reconocer su dureza y sequedad, clamando con la Samaritana por el agua que da Vida. Rasgar el corazón es,  como el ciego de nacimiento, dejar que por sus grietas pase la luz que disipa las tinieblas. Rasgar el corazón y dejar, como Lázaro, que a través de las vendas de la muerte,  la voz potente del maestro contagie la vida.
Rasgar el corazón hoy, con un lenguaje iluminado desde la Pascua y heredero del magisterio del Papa Francisco que invitó e invita a la revolución de la ternura será para nosotros: “enternezcan el corazón”
Enternezcan el corazón para que la gracia que abundantemente nos regala el Dios de la vida los empape y experimenten su salvación. Enternezcan el corazón para que ningún dolor ni aflicción de los hermanos les resulte indiferente. Enternezcan el corazón para sentir la suavidad de la ternura del Padre sobre las llagas y heridas de antaño en la humanidad. Enternezcan el corazón para experimentar la alegría del amor donado y compartido, que nunca nos deja insatisfechos.
Enternezcan el corazón para anunciar con gozo, desde la propia carne, el Evangelio de la Vida abundante. Este es signo exterior de una realidad interior de conversión y de gracia de Dios que nos renueva en cada Pascua.
Conversión personal y pastoral para una Iglesia en Cuaresma, no será solamente un pueblo que ayuna y llora, sino sobre todo la de una comunidad que se pone a la escucha orante de la Palabra viva de Dios.  Una Iglesia que se deja moldear así  por su Señor experimenta de modo entrañable que la inteligencia del misterio de Cristo vivido en plenitud consiste en “dejar libres a los oprimidos, partir su pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo...” Ayunar, para dar al prójimo.
Con este marco tan cargado y fortalecido por la presencia de Dios los invito, como iglesia Arquidiocesana, a reforzar sus esfuerzos y generosidad con el “gesto cuaresmal solidario”. La experiencia de estos años ha puesto de manifiesto la vitalidad de las palabras del Señor en el corazón de cada uno de ustedes, que se ha hecho gesto en el compromiso de nuestra Iglesia en Buenos Aires con sus miembros más débiles.
Que Dios les regale una profunda Cuaresma solidaria y una santa y gozosa Pascua.

Cardenal Mario Aurelio Poli
Arzobispo de Buenos Aires


2.    Gesto solidario arquidiocesano

Durante el tiempo de Cuaresma (que se inicia este año 2014 el 5 de marzo con la celebración del miércoles de ceniza) las parroquias, los colegios, las iglesias y las demás comunidades de la Arquidiócesis de Buenos Aires, como desde hace ya varios años, ofrecemos las privaciones propias de este tiempo sagrado en favor de nuestros hermanos más pobres. El total de lo recaudado será distribuido en las siguientes obras solidarias, propuestas oportunamente por cada Vicaría Zonal:

Vicaría Belgrano
1.      Construcción y puesta en marcha de una panadería en el centro Barrial P. Carlos Mugica sede del Hogar de Cristo (Pquia. Cristo Obrero – Villa 31)
2.      Ampliación Centro Comunitario del Barrio Mitre, dedicado a tareas solidarias, educativas y evangelizadoras (Pquias. de Decanato 7 Saavedra-Núñez)

Vicaría Centro

3.      Jardín Maternal Cura Brochero (Pquias. Virgen de los Milagros de Caacupé - Villa 21 y Virgen de Luján)

Vicaría Devoto

4.      Ampliación y reparación de los baños y dependencias del Servicio Social San Cayetano (Pquia. San Cayetano Liniers)
5.      Construcción salón para atención social de Caritas parroquial, del Decanato y Vicaría. (Pquia. Ntra. Sra. de los Dolores)

Vicaría Flores

6.      Apertura de centros barriales para el acompañamiento de personas en situación de sufrimiento a causa de las drogas, en especial de paco. (Pquias. Decanato 20 Soldati)

- La rendición de gesto solidario cuaresmal 2013 se publica en el Boletín Eclesiástico Febrero Marzo 2014.
- Los sobres y afiches para el año 2014 ya están a disposición en cada Vicaría Zonal.

3.    Horario en Iglesia Catedral Primada de Buenos Aires

Horario especial

8.00                 Santa Misa con laudes e imposición de las cenizas

9.00                 Santa Misa con imposición de las cenizas

12.30               Santa Misa con imposición de las cenizas.

13.30               Meditación: El ayuno cuaresmal camino hacia la pascua interior

18.00         Santa Misa Solemne con imposición de las cenizas. Presidida por el Sr. Arzobispo de Buenos Aires Card. Mario A. Poli

Confesiones: de  8.30 a 13.30 y de 15.00 a 18.30

sábado, 22 de febrero de 2014

Cardenal Poli.

Para agregar a la oración de los fieles del sábado 22 y domingo 23 de febrero

1.      Por  toda la Iglesia, para que unida en la fe y la caridad pueda predicar con libertad interior el único Evangelio de Cristo el Señor. Oremos
2.      Por nuestro Santo Padre el papa Francisco, para con la fuerza del Espíritu Santo pueda seguir siendo instrumento de Dios para bien de toda la Iglesia. Oremos.
3.      Por nuestro Arzobispo, agregado al Colegio de los Cardenales, para que en este nuevo servicio al Pueblo de Dios experimente el gozo de vivir más ampliamente su vocación ministerial. Oremos.
4.      Por nuestra Arquidiócesis de Buenos Aires, para que al ver a su Arzobispo creado Cardenal, le haga vivir con solicitud caritativa las necesidades y preocupaciones de la Iglesia Católica en toda su extensión. Oremos.

Los Cardenales de la Santa Romana Iglesia


I.        Antecedentes históricos

El Colegio de Cardenales de la Santa Iglesia Romana tiene su origen histórico en el conjunto de presbíteros y diáconos de Roma, más los Obispos de las diócesis sufragáneas (las que rodean) de Roma (estas diócesis, para el caso de Roma, se denominan como Suburbicarias).

El término de cardenal proviene, precisamente, del hecho de que estos clérigos estaban incardinados, es decir pertenecían a la diócesis romana. Desde el primer momento el Romano Pontífice acudió a ellos como cuerpo consultivo.

Desde el siglo XII se incorporaron al Colegio Cardenalicio miembros residentes fuera de Roma y así se convirtieron en Cardenales los Arzobispos u Obispos de las principales Sedes del mundo. Sin embargo, como reminiscencia de los orígenes del Colegio, sus miembros se adscriben a uno de los Ordenes que históricamente lo formaban (Cardenales Obispos, Cardenales Presbíteros o Cardenales Diáconos). Actualmente el Colegio de Cardenales está regulado por los cánones 349 a 359.

II.      Funciones

La función del Colegio de Cardenales es la de ayudar colegialmente al Papa en el gobierno de la Iglesia. Tradicionalmente lo hacen por medio de los Consistorios: el Consistorio ordinario y el Consistorio extraordinario. Si el Consistorio ordinario reúne ciertas solemnidades, se llama público, y se convoca además a otras autoridades, como ciertos Prelados, representantes diplomáticos u otros invitados. En la práctica, hasta el momento, el Colegio Cardenalicio, en sede plena, sólo se reúne para los Consistorios en que se crean nuevos Cardenales, y en los que se aprueba la canonización de nuevo santos. Fue histórico el Consistorio Ordinario convocado para algunas causas de canonización del 11 de febrero de 2013 durante el cual el Papa Benedicto XVI anunció que por renuncia quedaba vacante la Sede Apostólica el próximo 28 de febrero a las 20 hs.
Desde el pontificado de Juan Pablo II e intensificado también por el papa Benedicto XVI, se convoca al Colegio de Cardenales a reuniones plenarias para consulta de temas específicos que el Pontífice solicita consejo. También en este sentido de colaboración con el Romano Pontífice los Cardenales presiden algunos de los Dicasterios de la Curia Romana o los integran como miembros, esto último aún los Cardenales que por su ministerio episcopal habitan fuera de Roma.
Al Colegio de Cardenales le corresponde la elección del Papa, cada vez que se produce la vacante de la Sede Romana. Se regula por la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, de 22 de febrero de 1996. Los Cardenales se reúnen en cónclave para proceder a la elección del nuevo Romano Pontífice. Al cónclave tienen derecho a asistir todos los Cardenales que no hayan cumplido 80 años en el momento de producirse la vacante de la Sede Apostólica.

III.    La estructura del Colegio

El Colegio Cardenalicio está dividido en tres órdenes: el episcopal, el presbiteral y el diaconal. Los órdenes siguen la tradición de incardinación (pertenencia de un clérigo a una diócesis determinada) en la diócesis de Roma. La adscripción a un orden la hace el Papa. Tal adscripción a un orden no significa que el sujeto sea diácono o presbítero: el canon 351 § 1 prescribe que los promovidos a cardenal que no sean Obispos, deben recibir la consagración episcopal. Esta determinación proviene de la decisión de Juan XXIII, con el Motu Proprio Cum gravissima, del 15 de abril de 1962, donde estableció que todos los Cardenales fueran honrados con la dignidad episcopal.
Al orden episcopal del Colegio pertenecen los cardenales a los que se les asigna una de las Diócesis Suburbicarias. Estas Diócesis son Ostia, Albano, Frascati, Palestrina, Porto y Santa Rufina, Sabina y Poggio Mirteto, y Velletri. Los cardenales del Orden presbiteral reciben un Título (Iglesia) de la ciudad de Roma. A este orden principalmente pertenecen los cardenales que son Obispos Diocesanos, y otros cardenales. El tercero es el Orden de los Diáconos al que comúnmente pertenecen los cardenales que residen en Roma. Esta división del Colegio es meramente formal e histórica, ninguno de los cardenales a los que se les asignan ejercen funciones de gobierno en ellos, cada lugar eclesiástico que se lo reconoce como Título tiene al verdadero superior, ya sea el Obispo Diocesano para las Diócesis Suburbicarias, Párrocos o Rectores para los títulos presbiterales o diaconales. La única visualización de esta realidad es que los Cardenales están obligados a tomar posesión del Título y colocar su escudo en el lugar junto con el del Pontífice.
            El número de los Cardenales, en los siglos XIII-XV, ordinariamente no es superior a 30, fue fijado por Sixto V en 70: 6 Cardenales Obispos, 50 Cardenales Presbíteros, 14 Cardenales Diáconos (Constitución Postquam verus, del 3 de diciembre de 1586).
            En el Consistorio Secreto del 15 de diciembre de 1958 (A.A.S., año 1958, vol. XXV, pag. 987), Juan XXIII derogó el número de Cardenales establecido por Sixto V y confirmado por el Código de Derecho Canónico de 1917 (can. 231).
            Pablo VI, con el Motu Proprio Ad Purpuratorum Patrum, del 11 de febrero de 1965, determinó el lugar de los Patriarcas Orientales en el Colegio Cardenalicio. El mismo Sumo Pontífice, con el Motu Proprio Ingravescentem aetatem, del 21 de noviembre de 1970, dispuso que con el cumplimiento de los 80 años de edad los Cardenales: a) cesan de ser Miembros de los Dicasterios de la Curia Romana y de todos los Organismos Permanente de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano; b) pierden el derecho de elegir al Romano Pontífice y, por ende, también el derecho de entrar en Cónclave. En el Consistorio Secreto del 5 de noviembre de 1973 el mismo Pablo VI estableció que el número máximo de Cardenales que tienen la facultad de elegir al Romano Pontífice se fijara en 120 (A.A.S., año 1973, vol. LXV, pag. 163). Juan Pablo II, en la Constitución Apostólica Universi Dominici gregis, del 22 de febrero de 1996, ha reiterado dichas disposiciones.
            En la actualidad el número de los Cardenales es móvil, pero los papas hasta ahora no han derogado la norma de que los electores del Sumo Pontífice no superen los 120 y cuando crean Cardenales hacen que no haya más de ese número entre los menores de 80 años. Pero el Sumo Pontífice se reserva el derecho de nombrar a otros eclesiásticos, obispo o no, mayores de 80 años como miembros del Colegio pero sin el derecho a participar en un eventual Conclave, estos Cardenales muchas veces piden al Papa la dispensa de ser ordenados Obispos tal como prescribe el Código de Derecho Canónico.

IV.   El rito del Consistorio para la creación de cardenales

El actual rito del Consistorio, simplificado después del Concilio Vaticano II y ordenado durante el Pontificado de Benedicto XVI para expresar mejor el servicio ministerial de los Cardenales, consiste:

- Ingreso del Santo Padre
- Señal de la Cruz y saludo
- Oración pidiendo la ayuda de Dios para este acto importante del ministerio petrino.
- Lectura del Evangelio
- Alocución del Santo Padre
- Designación por parte del Sumo Pontífice de los nuevos Cardenales.
- Profesión de fe y juramento de los nuevos Cardenales (Yo [nombre y apellidos], cardenal de la Santa Romana Iglesia, prometo y juro ser fiel desde ahora y para siempre mientras viva a Cristo y a su Evangelio, siendo constantemente obediente a la Santa Iglesia Apostólica Romana, al bienaventurado Pedro en la persona del Sumo Pontífice NN y de sus sucesores canónicamente elegidos; mantener siempre con palabras y obras la comunión con la Iglesia católica; no revelar a nadie lo que se me confíe en secreto ni divulgar aquello que podría acarrear daño o deshonra a la Santa Iglesia; desempeñar con gran diligencia y fidelidad las tareas a las que estoy llamado en mi servicio a la Iglesia, según las normas del derecho. Que así me ayude Dios omnipotente.)

- Imposición de la birreta, entrega del anillo cardenalicio y asignación de Título
- Abrazo de paz con los miembros del Colegio de Cardenales
- Padre nuestro
- Bendición Apostólica del Sumo Pontífice

V.      El simbolismo del colorado: Usque ad sanguinis efussionem

El Sumo Pontífice cuando les coloca a cada uno de los nuevos cardenales recién creados la birreta (insignia propia ahora de los Cardenales) les recuerda el simbolismo del color: "Esto es rojo como signo de la dignidad del oficio de cardenal, y significa que estás preparado para actuar con fortaleza, hasta el punto de derramar tu sangre por el crecimiento de la fe cristiana, por la paz y armonía entre el pueblo de Dios, por la libertad y la extensión de la Santa Iglesia Católica Romana".

VI.   Un servicio humilde y amplio a la Iglesia toda colaborando con el Papa

Es el propio Santo Padre, quien marca tres puntos esenciales para comprender el ministerio de los Cardenales en la carta que les envió el 13 de enero de 2014 a los anunciados para el próximo Consistorio:

1.      “… Deseo que, al sumarte a la Iglesia de Roma, revestido de las virtudes y de los sentimientos del Señor Jesús (cf. Rm 13, 14), puedas ayudarme con fraterna eficacia en mi servicio a la Iglesia universal…”

2.      “… El cardenalato no significa una promoción, ni un honor, ni una condecoración; es sencillamente un servicio que exige ampliar la mirada y ensanchar el corazón…”

3.      “… te pido, por favor, que recibas esta designación con un corazón sencillo y humilde. Y, si bien tú debas hacerlo con gozo y alegría, actúa de manera que este sentimiento esté lejos de toda expresión de mundanidad, de todo festejo ajeno al espíritu evangélico de austeridad, sobriedad y pobreza…”

Que los Cardenales revestidos de las virtudes y los sentimientos del Señor Jesús, Buen Pastor, puedan ayudar más eficazmente al Obispo de Roma en su servicio a la Iglesia universal.

Buenos Aires, 11 de febrero de 2014.
Memoria de Ntra. Sra. de Lourdes
pbro. lic. Alejandro G. Russo




13 de marzo
Iº aniversario de la elección del Santo Padre Francisco

Solemne Misa de Acción de Gracias
y recepción de nuestro Arzobispo recientemente
creado Cardenal de la Santa Romana Iglesia

Iglesia Catedral de Buenos Aires 19 hs.

jueves, 13 de febrero de 2014

Nuestra Señora de Coromoto.

VENEZUELA

La patrona del pueblo venezolano, Nuestra Señora de Coromoto, fue llamada así en recuerdo de la conversión del cacique Coromoto y de su familia, en la comarca de Guanare, a mediados del siglo XVII. 


La ciudad de Guanare había sido fundada en 1591 y no eran pocas las dificultades que afrontaban los misioneros en su tarea evangelizadora con los pueblos originarios. Según la tradición, en 1652 el cacique Coromoto y su mujer fueron testigos de una extraña aparición en una quebrada, de una señora que les habló en su idioma y los invitó a recibir el agua del bautismo.
Por un tiempo el cacique se resistió a convertirse a la fe cristiana, hasta que el 8 de septiembre recibe la visita de la misma señora, esta vez en su choza. Aunque la amenazó con su arco y una flecha, la señora se acercó dejando en sus manos una pequeña imagen, que después se tornó en objeto de culto y veneración bajo la advocación de Nuestra Señora de Coromoto. Se dice que luego de recibir el bautismo el cacique se convirtió en apóstol y misionero.
La reliquia que recibió el cacique permanece en un pedestal de la imagen de madera que hoy se encuentra en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Coromoto, en el Estado de Portuguesa.
Su fiesta nacional es el 8 de septiembre.

ÓSCAR ELIZALDE PRADA

Nuestra Señora de la Altagracia.

REPÚBLICA DOMINICANA

Las primeras noticias que se tienen del cuadro de Nuestra Señora de la Altagracia, patrona de la República Dominicana, son de inicios del siglo XVI. 
Aunque existen diversas versiones sobre los orígenes del lienzo, una de las más conocidas dice que los hermanos Alfonso y Antonio Trejo —unos de los primeros europeos en llegar a la isla— llevaron el óleo a la ciudad de Higüey y lo entregaron a la parroquia para que fuera venerado por todos.
La devoción fue creciendo al tiempo que se atribuían milagros a la intercesión de la Virgen María. Una de ellos cuenta la frustración de un mercader que al regresar de Santo Domingo a Higüey no había logrado conseguir una imagen de Nuestra Señora de la Altagracia, tal como se lo había pedido una de sus hijas. En la noche y ante la angustia del padre, un hombre de edad avanzada y de largas barbas, que se encontraba de paso, sacó de su alforja un pequeño lienzo enrollado y de lo entregó diciéndole: "esto es lo que usted busca". Se trataba del cuadro que había estado buscando. Al día siguiente, no se encontró pista alguna del anciano.
El lienzo, de 33 centímetros de ancho por 45 de alto, muestra una escena de la Natividad. En ella, la Virgen María ocupa el centro y su mirada se dirige al niño recién nacido, que descansa sobre pajas. San José se encuentra al fondo, en un segundo plano. También se observa la estrella de Belén y un rayo de luz que abraza el misterio de la encarnación. Bien puede considerarse como un icono de los primeros años de la evangelización.
La imagen de Nuestra Señora de la Altagracia ha sido coronada durante los pontificados de Pío XI (1922) y del beato Juan Pablo II (1979). También ha sido restaurada en varias oportunidades. Los dominicanos celebran su fiesta el 21 de enero.

ÓSCAR ELIZALDE PRADA 

Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

HAITÍ

Se la celebra cada 27 de junio y fue en 1882, a partir de una severa sequía que se planteó junto con una epidemia de viruela, que se intensificó la devoción a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.


En esa ocasión, rezando el pueblo haitiano a su Madre representada con su icono en un cuadro, llovió y las consecuencias de la epidemia comenzaron a ceder.
Por pedido del presidente, Elie Lascot, el 8 de diciembre de 1942 los cinco obispos de Haití ofrendaron su país a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.
El Papa Juan Pablo II visitó Haití con motivo del centenario del milagro. Hermosas y emotivas imágenes se recuerdan de ese encuentro entre el Sumo Pontífice y el pueblo haitiano.
Si nos referimos al icono, vemos a una María que cuidadosamente sostiene al Niño Jesús que se agarra con fuerza de su Madre. Dos ángeles completan las figuras que anuncian la Pasión de Cristo.

VIRGINIA BONARD
FUENTES: Portales y Agencias 

Nuestra Señora de la Caridad del Cobre.

CUBA

La tradición reconoce a "los tres Juanes" el hallazgo de la Virgen de la Caridad del Cobre, entre 1612 y 1613. Juan de Hoyos, Rodrigo de Hoyos y Juan Moreno, eran sus nombres y tenían entre 9 y 10 años de edad. 


La aparición de la Virgen ocurrió mientras iban a buscar sal en la bahía de Nipe, según el relato de Juan Moreno a la edad de 85 años:
"...habiendo ranchado en cayo Francés que está en medio de la bahía de Nipe para con buen tiempo ir a la salina, estando una mañana la mar calma salieron de dicho cayo Francés antes de salir el sol, los dichos Juan y Rodrigo de Hoyos y este declarante, embarcados en una canoa para la dicha salina, y apartados de dicho cayo Francés vieron una cosa blanca sobre la espuma del agua, que no distinguieron lo que podía ser, y acercándose más les pareció pájaro y ramas secas. Dijeron dichos indios 'parece una niña', y en estos discursos, llegados, reconocieron y vieron la imagen de Nuestra Señora la Virgen Santísima con un Niño Jesús en los brazos sobre una tablita pequeña, y en dicha tablita unas letras grandes las cuales leyó dicho Rodrigo de Hoyos, y decían: 'Yo soy la Virgen de la Caridad', y siendo sus vestiduras de ropaje, se admiraron que no estaban mojadas. Y en esto, llenos de alegría, cogieron sólo tres tercios de sal y se vinieron para el Hato de Barajagua...".
Pronto se levantó una ermita para acoger la imagen, que luego fue trasladada en más de una ocasión, hasta que finalmente se ubicó en la basílica donde hoy se encuentra, en el santuario nacional de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, en Santiago de Cuba.
Su devoción se propagó con extraordinaria rapidez y no ha menguado en la historia del pueblo cubano, como se pudo comprobar hace unos años, con motivo de la visita del papa Benedicto XVI a la isla, cuando se celebraron los 400 años de su aparición y se llevó a cabo una gran peregrinación por toda la isla. El 8 de septiembre se celebra la fiesta de la patrona de Cuba.
ÓSCAR ELIZALDE PRADA 

Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá.

COLOMBIA

La advocación a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá corresponde a un cuadro con la imagen de la Virgen María que fue pintado por Alonso de Narváez hacia 1562, por solicitud del encomendero Antonio de Santana y con la mediación del fraile dominico Andrés Jadraque. 
Para la pintura, de 126 x 113 centímetros, Narváez utilizó un lienzo tejido por indígenas, mezcla de tierra de colores y zumo de yerbas y flores. Junto a la imagen de la virgen del Rosario, se observan la de san Antonio de Padua, al lado derecho, y la de san Andrés apóstol, al lado izquierdo. Fue expuesta en una sencilla capilla hecha de paja en la región de Suta, donde fray Andrés catequizaba a los indígenas.
Con el tiempo, y con la ausencia del fraile, la capilla pasó al olvido. El sol y algunas goteras deterioraron el cuadro. Con la muerte de Santana, Catalina de Irlos, su esposa, se retiró a la aldea de Chiquinquirá llevando consigo el viejo lienzo que ya no era objeto de devoción sino que servía para secar el trigo al sol. Fue la española María Ramos, cuñada del difunto Santana, quien a su llegada a Chiquinquirá decidió recuperar el lienzo maltratado. En su presencia, el 26 de diciembre de 1586 ocurre el milagro de la renovación del cuadro, que recupera sus colores y su belleza original y en adelante se convierte en objeto de devoción popular, bajo la advocación de "Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá"
Hoy el cuadro permanece en la basílica de Chiquinquirá, a tres horas de Bogotá, confiado a la Orden de Predicadores (dominicos). En varias ocasiones se han realizado peregrinaciones para la intercesión de la patrona de Colombia ante las pestes y las guerras. Más recientemente, a finales de 2013, se llevó a cabo una peregrinación por el río Magdalena para orar por el fin del conflicto armado y la reconciliación en Colombia.

ÓSCAR ELIZALDE PRADA 

Virgen del Carmen, patrona de Chile.

CHILE

Su fiesta es el 16 de julio y la primera imagen de la Virgen del Carmen que pisó suelo chileno la portó don Pedro de Valdivia - conquistador y colonizador español - hacia mediados del siglo XVI.


La devoción se difunde a través de la fundación de la Cofradía del Carmen y de la construcción de parroquias, capillas y monasterios confiadas a su protección.
La imagen propiamente dicha fue realizada por Marín de Lecuna en el año 1785 en la ciudad de Quito; fue en tierras de su propiedad donde se la veneraba y desde donde partía la procesión organizada con motivo de la novena en su honor, hasta la Iglesia de San Agustín en Santiago.
La devoción a la Virgen del Carmen está estrechamente ligada a las luchas por la independencia en la América del Sur ya que tanto O'Higgins como San Martín —ambos patriotas de Chile y Argentina respectivamente— se encomiendan a ella en su misión libertadora designándola patrona del Ejército de los Andes.
El 7 de mayo de 1818 se dicta el decreto que determina la iniciación de la construcción de un templo bajo su advocación y el 14 de noviembre de ese mismo año, O'Higgins coloca la primera piedra en los llanos de Maipú. Pero fue durante la primera mitad del siglo XX —la primera piedra fue colocada el 16 de julio de 1944— que se erigió el templo donde se la venera en la actualidad.
Con respecto a su imagen, son dos las más apreciadas por el pueblo chileno: la que se encuentra en el Santuario Nacional de Maipú —la que citamos más arriba, de 1785— y la de la Basílica del Salvador en Santiago de Chile, realizada en Francia, en el siglo XIX, en la Casa Rorissier.
La escultura —tallada en madera tilia— representa a la Virgen María de cuerpo entero llevando en brazos al Niño Jesús. Está tallada en madera de tilia europea, tiene ojos de cristal y está vestida con ropajes a la usanza europea de ese tiempo.
Fue a partir del año 1923 que la Virgen del Carmen se convierte en Patrona de todo el pueblo de Chile, siendo patrona también de los marineros, pescadores y hombres de mar de dicho país.

VIRGINIA BONARD
FUENTES: Portales y Agencias 

Nuestra Señora de Aparecida, patrona de Brasil.

BRASIL

La historia de Nuestra Señora de Aparecida, la padroeira (patrona) de Brasil, en cuyo santuario tuvo lugar la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en el 2007, se remonta a los tiempos de la colonia, en 1716.
Domingos Garcia, Filipe Pedroso y João Alves habían recibido el encargo de hacer una buena pesca en el río Paraíba, con la cual el pueblo de Guaratinguetá deseaba honrar la presencia del gobernador don Pedro de Almeida y Portugal, que se encontraba de paso por la pequeña villa. Después de muchos intentos infructuosos y en medio de la angustia, los pescadores clamaron a la madre de Dios. Al lanzar de nuevo las redes, João Alves encuentra el cuerpo sin cabeza de una pequeña imagen negra de Nuestra Señora de la Concepción. Posteriormente, al lanzar nuevamente las redes, encontró la cabeza. Como en el Evangelio, las redes no daban abasto para la abundante pesca que atribuyeron a la intercesión de la Virgen María.
La imagen fue puesta en un sencillo oratorio y muy pronto comenzó a recibir la visita de los vecinos, que se reunían a cantar y a rezar el rosario. Con el tiempo aumentaron los peregrinos y la imagen de 36 centímetros empieza a ser conocida con la advocación de Nuestra Señora de la Concepción de Aparecida.
El santuario mariano, que se encuentra ubicado en el estado de São Paulo, es considerado el cuarto más grande del mundo. Su basílica puede acoger hasta 45.000 feligreses. El año pasado recibió la visita del papa Francisco con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud.
ÓSCAR ELIZALDE PRADA 

Nuestra Señora de Copacabana.

BOLIVIA

Su nombre completo es Santísima Virgen de la Candelaria, Nuestra Señora de Copacabana, y se la celebra el 5 de agosto.


Situémonos un poquito más de adelante de mediados del siglo XVI, a orillas del bellísimo lago Titicaca. La historia de la confección de esta imagen mariana nos habla de idas y venidas, creencias y supersticiones superpuestas de dos pueblos indígenas bolivianos: los anansayas y los uninsayas.
Las manos de dos hermanos —Francisco Tito Yupanqui y Felipe— trabajaron la arcilla que formaría la imagen de María en su advocación de la Candelaria. Pero los resultados dieron un rostro poco agraciado motivo por el cual fue descartada de los altares. Esto movilizó a Francisco Tito para estudiar escultura y se fue a Potosí. Allí talló otra imagen que tampoco fue aceptada por los interesados originales pero sí por un sacerdote de la localidad de Copacabana. El 2 de febrero de 1583, en los cerros de Guacuyo, comenzó su devoción y su fama de milagrosa.
La primera capilla inició su construcción en 1614, la basílica fue inaugurada como tal en 1678 y el templo como se lo conoce en la actualidad nos remonta al año 1805.
Su rostro es bello, delicado y tiene rasgos indígenas; su imagen que mide un poco más de 1.20 metros, fue realizada en maguey, terminada en estuco y laminada en oro fino. Si observamos sus ropajes, está revestida a la usanza de las princesas incas y sostiene al Niño Jesús como si estuviera por caérsele.
La Virgen de Copacabana fue coronada "reina de la nación" en ocasión del primer centenario de Bolivia el 1° de agosto de 1925.

VIRGINIA BONARD
FUENTES: Portales y Agencias 

Nuestra Señora de Luján, patrona de Argentina.

ARGENTINA

Se la celebra cada 8 de mayo y su historia se remonta al año 1630 cuando una imagen suya llegó al suelo argentino por pedido de un hacendado radicado en Santiago del Estero (actual provincia argentina del mismo nombre). 


Esta imagen llegó desde Brasil junto con otra que tenía también al Niño. Ambas debían llegar a Sumampa y allá fueron viajando en carreta.
A 67 km de Buenos Aires la caravana —con la carreta y las imágenes incluidas— se detuvo, cerquita del río Luján, en la estancia de Rosendo. Y de allí no se movió más hasta que, después de varios intentos subiendo y bajando mercaderías para alivianar la carga, descubrieron que cuando la imagen con la Virgen de Luján quedaba en tierra, la carreta marchaba con normalidad.
Al percibir algo milagroso, los carreteros buscaron a Rosendo y su familia quienes construyeron una capilla pequeña y así estuvo la Virgencita de Luján hasta el año 1674. Este lugar era muy visitado ya que esta historia llegó hasta Buenos Aires.
Entra en este relato el Negro Manuel quien llegó al Río de la Plata en el mismo barco junto con la imagen de la Virgen y fue testigo del milagro de la carreta. El Negro Manuel le dedicó su vida a cuidar a la Virgen, aun después de la muerte de don Rosendo; la tradición popular cuenta las curas milagrosas que realizaba con el sebo de las velas ofrendadas a María de Luján y de los "paseos" que, de noche, hacía la Virgen para visitar a los afligidos.
Fue fundacional el año 1674 en la historia de la Virgen de Luján. Doña Ana Mattos, viuda de Siqueyras, poseedora de muchos terrenos en las zonas aledañas al río Luján, le construyó a la Virgen una capilla en su casa. Dos veces intentaron que la imagen se quedara en su nueva casa, pero, misteriosamente, la imagen volvía a su antigua ermita. Cuando en una tercera oportunidad fue acompañada por el Negrito Manuel y en peregrinación, la imagen ya no se movió de su nuevo hogar que fue autenticado por las autoridades eclesiásticas que permitieron el culto público a la "Pura y Limpia Concepción del Río Luján". Y fue Doña Ana Mattos quien, en 1677, donó el terreno para la construcción del templo nuevo, donde actualmente se venera a la Patrona de la Argentina.
Después de muchos milagros —entre ellos el del primer capellán don Pedro de Montalbo—y construcciones fallidas, fue por impulso y agradecimiento por los favores recibidos de don Juan Lezica y Torrezuri que en 1754 se inició la construcción del templo que finalizó exitosamente en 1763.
Desde 1872 el templo estuvo a cargo de los padres lazaristas. El padre Jorge María Salvaire, quien recibió un milagro de la Virgen de la Luján, fue nombrado párroco en 1889 y le ofrendó su vida a la construcción de lo que se conoce como la actual basílica nacional. La obra —que se prolongó de 1887 a 1935— fue continuada y finalizada en su estructura fundamental por el padre Dávani y sus autores son los arquitectos e ingenieros Alfonso Flamand, Ulrich Courtois, Ernesto Moreau, Rómulo Ayerza y Fleury Tronqoy.
La imagen —que está recubierta de una coraza de plata— mide 38 centímetros, su rostro es moreno, está modelada en terracota. Está vestida con una túnica blanca y un manto celeste fuerte.

VIRGINIA BONARD
FUENTES: Portales y Agencias 

Virgen de Salette, patrona de las islas Antillas.

ANTILLAS
Se la celebra cada 19 de septiembre y su historia nos lleva de viaje hasta los Alpes franceses, a un 19 de septiembre de 1846 cuando su imagen se apareció a dos pastores, Maximinio y Melania. 


Envuelta en una bola de fuego, allí, en esa ocasión extraordinaria y aceptada por la Iglesia como "auténtica, indudable y cierta", la Virgen dejó su mensaje de pedido de más oración y espiritualidad para el mundo entero.
Esta devoción llegó a la isla Dominica —que forma parte de las Antillas— ya que durante un tiempo prolongado estuvo bajo el dominio francés.

VIRGINIA BONARD
FUENTES: Portales y Agencias