martes, 6 de agosto de 2013

Peregrinación a Luján.

Queridos peregrinos

¡Hace cuánto tiempo siento que fué la última vez que, juntos, caminamos a encontrarnos con la Madre del Cielo!.¡Tanto tiempo parece un año esperando poder renovar nuestro compromiso filial!

Les escribo para incentivarlos a que vayan preparando desde ya su alma, su corazón y sus fuerzas para, en esta muestra de particular devoción a Jesús Sacramentado en la Misa, y a nuestra Madre Santísima, encontremos la concordia, es decir, la unión de los Corazones, con un mismo Amor, el de Cristo, y una misma Fe, la de su Iglesia.

La Misa es la renovación del Sacrificio de la Cruz, incruento, en el que el Hijo se ofrece al Padre en satisfacción por nuestros pecados, para nuestro perdón, pedirle lo que necesitamos y adorarlo como Él quiere. De ahí la importancia de hacerla con la mayor honra y dignidad que esté a nuestro alcance, y sino está a nuestro alcance, procurar todos los medios para alcanzarla.
 Es una inmensa gracia poder compartirla con ustedes, bajo el amparo de nuestro santo patrono,  Santo Toribio. Obispo fuerte, recio, incansablemente tenaz en la conquista de las almas, sombra del Padre Eterno, ocupándose de todos, reflejo del Hijo Unigénito, intercediendo y sanando a los suyos, soplo del Espíritu Santo, llevando la Gracia y sus dones con los Sacramentos. Sus virtudes heroicas y su confianza serena en la Providencia son luz y guía para nosotros en nuestro quehacer cotidiano.

Es nuestra lucha, la del cristiano, conservar heroicamente la Fe en el tiempo que la Providencia nos regala. Nos regala también sus Dones y este grupo de amigos de la Cruz, e hijos de la Virgen para que unidos a los Sagrados Corazones de Jesus y de Maria, lleguemos al Cielo, donde ya no habrá más muerte ni dolor, donde el Señor enjuagará nuestras lágrimas, donde veremos a Dios cara a cara, saboreando sus delicias con nuestro cuerpo resucitado, y estos ojos y estas manos, renovados por la Sangre del Cordero adorarán al Uno y Trino Señor, por los siglos de los siglos. Felicidad. Completa. Para siempre.

También aprovecho para invitarlos a una charla que va a darse el jueves a las 19 hs charla sobre la fe en la ACS (Asociación Cristo Sacerdote), Vicente lopez 1639, CABA.
Se hablarán asimismo temas prácticos de la Peregrinación.

                “Que no haya en nuestra vida, día sin Domingo,
no haya Domingo sin Misa, ni Misa sin Cristo.”
               

Santo Toribio, el peregrino de América, nos proteja
Cordialmente,
 a Cristo por María.

Juan Fermin Seligmann
Jefe de Capítulo

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